El moho de 'mascota' mantiene este reloj en marcha

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Apr 28, 2023

El moho de 'mascota' mantiene este reloj en marcha

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Usando un moho mucilaginoso, un organismo unicelular eléctricamente conductor, los investigadores crearon un reloj inteligente que solo funciona cuando el organismo está sano, lo que requiere que el usuario le dé alimento y cuidado.

Los dispositivos como teléfonos celulares, computadoras portátiles y relojes inteligentes son compañeros constantes para la mayoría de las personas, ya que pasan días y noches en el bolsillo, en la muñeca o al alcance de la mano.

Pero cuando estas tecnologías fallan o un modelo más nuevo llega a las tiendas, muchas personas se apresuran a desechar o reemplazar su dispositivo sin pensarlo dos veces. Esta disposición a desecharse conduce a niveles crecientes de desechos electrónicos, la categoría de desechos de más rápido crecimiento, con 40 millones de toneladas generadas cada año.

Los científicos se preguntaron si podrían cambiar esa relación voluble dando vida a los dispositivos, literalmente.

Después de crear el reloj de moho, probaron cómo el dispositivo vivo afectaba la actitud de su usuario hacia la tecnología.

"La gente se vio obligada a pensar en su relación con los dispositivos de muchas maneras realmente interesantes", dice Jasmine Lu, estudiante de posgrado de cuarto año en el Laboratorio de integración humano-computadora de Pedro Lopes en la Universidad de Chicago. Lopes es profesor asistente en el departamento de informática.

"Al hablar de sus experiencias con relojes inteligentes normales, Fitbits u otros dispositivos portátiles, las personas dijeron que solo lo usaban con un propósito explícito. Y con este dispositivo, se sentía más como una relación bidireccional porque tenían que cuidarlo. Ellos también tenían algún tipo de apego porque está vivo, y sentían que no podían tirarlo o simplemente guardarlo en el armario".

Lu diseñó y construyó los relojes para dar la hora y medir el ritmo cardíaco del usuario. Sin embargo, la segunda función depende de la salud y las características únicas de Physarum polycephalum, una especie de moho mucilaginoso a veces llamado "la gota", por su rápido crecimiento, resistencia y curiosas habilidades para resolver laberintos.

El organismo entra en un recinto en el reloj, y el usuario debe alimentarlo regularmente con una mezcla de agua y avena para inducir su crecimiento. Cuando el moho llega al otro lado del recinto, forma un circuito eléctrico que activa la función de monitor de frecuencia cardíaca. El organismo también puede entrar en un estado inactivo cuando no se alimenta, lo que permite la reactivación días, meses o incluso años después.

"Gran parte de la investigación sobre la interacción humano-computadora está motivada por hacer que las cosas sean más fáciles y rápidas de usar", dice Lopes. "Pero Jasmine pensó que debería haber más fricción; deberías cuidarlo y alimentarlo todos los días, solo por tener que reflexionar sobre él. Entonces, es como una mitad obra de arte y mitad un trabajo de investigación".

Una vez que se construyeron los relojes, Lu y Lopes realizaron un estudio con cinco participantes que usaron el reloj durante dos semanas. Durante la primera semana, los usuarios cuidaron el moho mucilaginoso hasta que se activó el control de la frecuencia cardíaca. Luego, durante la segunda semana, los investigadores pidieron a los participantes que dejaran de alimentar al organismo, lo que provocó que se secara e interrumpiera la función del ritmo cardíaco. A lo largo del estudio, los participantes escribieron en diarios sobre sus sentimientos sobre el dispositivo y respondieron preguntas de la entrevista.

Los investigadores encontraron un alto nivel de apego al reloj, y algunos usuarios dijeron que se sentía como una mascota, incluso nombrándolo o poniendo a su pareja a cargo de la alimentación cuando se enfermaban.

Los sujetos dijeron que la conexión era más significativa que con mascotas virtuales como Tamagotchis o Los Sims, que pueden restablecerse casualmente después de la muerte. Aún más sorprendente fue la respuesta emocional cuando se les dijo a los participantes del estudio que descuidaran el organismo, expresando culpa o incluso dolor.

La gente se sorprendió; casi todos decían, '¿En serio? ¿Tengo que hacer eso?'”, dice Lopes. “Hubo respuestas muy humanas. Algunas personas estaban tristes, otras realmente sentían que la conexión se había roto".

Lu presentó el documento y una demostración del reloj en el Simposio ACM de 2022 sobre software y tecnología de interfaz de usuario. Su esperanza es que la investigación no solo inspire nuevos dispositivos creativos que funcionen con el poder del moho mucilaginoso, sino que también provoque que los diseñadores creen tecnologías que inspiren el apego y el beneficio mutuo, para que los dispositivos se sientan menos como herramientas desechables y más como socios.

"Con nuestros dispositivos, podemos participar en muchas formas diferentes de cuidado, como limpiarlos y cuidarlos, o repararlos cuando están rotos", dice Lu.

"Pero muchas de las formas en que los dispositivos de consumo están diseñados ahora, esos aspectos de la atención están menos enfocados o se vuelven inaccesibles; están hechos para que los deseche, en lugar de involucrarse más con ellos. Así que definitivamente creo que hay un Diseño para llevar de centrarse en este aspecto del cuidado de los dispositivos en lugar de simplemente consumirlos".

Fuente: Universidad de Chicago

estudio original